Después de todos los viajes que el Club organizó en las vacaciones de Semana Santa, parece que no le ha bastado para complacer a sus suscriptores, y también les ha brindado la posibilidad de conocer Holanda.

Pese a que es usual utilizar Holanda como denominación del país, lo cier to es que este país europeo se llama Países Bajos, y como bien nos indica su nombre está formado por tierras que nacen a la altura del mar o incluso por debajo de éste. Holanda es la región más histórica y relevante, se encuentra en la par te occidental del país y su idioma es el holandés, aunque el nombre oficial de la lengua es neerlandés.

Al viaje asistieron unas 40 personas desde Palma, Marratxí, Porto Colom, Calvià, Santa Maria del Camí, Esporles, Petra y Sant Joan. La organización del viaje también fue a cargo de Viajes Majórica, que eligió un lindo hotel para la ocasión, el Van der Valk Hotel Nieuwerkerk.

El viaje coincidió con el afamado Barça-Madrid, y 6 personas se quedaron en Amsterdam para ver el par tido, del que regresaron muy contentos porque todos eran del equipo catalán.
Entre las muchas visitas destacaron Volendam; Marken, un pequeño pueblo de pescadores, y el Gran Dique del Norte, una mágnifica obra de ingenier ía que cierra Ijseelmeer con sus 30 kms de largo y 7 mts de altura sobre el nivel del mar.

En Amsterdam, les encantó visitar la fábrica de diamantes, el mercado de las flores y el barrio rojo. También pudieron pasear por el parque de Keukenhof, que este año celebra su 60 aniversario y que sólo abre sus puer tas unos días, concretamente desde el 19 de marzo al 21 de mayo. El parque disfruta de nada más y nada menos que de 32 hectáreas con 4’5 millones de tulipanes de 100 variedades distintas.

La par te más cultural del viaje estuvo compuesta por las visitas a la ciudad de La Haya, el Palacio de Justicia y el Tribunal Penal Inter nacional de La Haya y Leiden.

Los molinos de Kinderdijk fueron otro de los atractivos que recorrieron en bicicleta. Desde el Euromast, con 185 metros de altura, apreciaron la panorámica de Rotterdam. Y el 4 de mayo, último día del itinerario, era una fecha destacada por la «Conmemoración de los caídos en la Segunda Guerra Mundial», lo cual añadió otra nota cultural al viaje.

Como curiosidad, Katy Orfila comentó que a to- dos les llamaron bastante la atención los desniveles de la ciudad y las extrañas combinaciones de las carreteras que pasan por encima de los viandantes.